¿Por qué es más fácil leer una novela que un tratado de filosofía? ¿Por qué nos gusta ver películas? ¿Por qué facebook tiene cada vez más usuarios? Aceptémoslo, nos gustan las historias. Si queremos comunicar de una manera eficaz tenemos que usar historias para explicar verdades profundas. Jesucristo mismo lo hacía, las llamamos parábolas. Las historias nos permiten conectar de una manera más profunda con nuestra audiencia. Con las historias no solo transmitimos información, también nos permiten transmitir emociones y motivar a quien nos escucha.
Por ejemplo, qué es más fácil de entender: «A Dios le gusta cuando damos con sacrificio» o «Levantando los ojos, vio a los ricos que echaban sus ofrendas en el arca de las ofrendas. Vio también a una viuda muy pobre, que echaba allí dos monedas de cobre. Y dijo: En verdad os digo, que esta viuda pobre echó más que todos. Porque todos aquéllos echaron para las ofrendas de Dios de lo que les sobra; mas ésta, de su pobreza echó todo el sustento que tenía.»
Las historias nos conectan a un nivel más profundo. Sabemos que no se trataba de cualquier mujer, sino de una viuda, sabemos que el único sustento de esta viuda eran dos monedas de cobre, y estuvo dispuesta a quedarse sin nada con tal de ofrendar a Dios. Todos entendemos el punto central de la enseñanza de Jesús, él enseñó a sus discípulos una verdad profunda basándose en la historia que estaba sucediendo.
Os doy cuatro consejos que pueden servirte al momento de contar una historia:
1) Debe ser sencilla. Recuerda: «lo bueno, si breve, dos veces bueno».
2) Trata solo un tema. No hables de muchos temas a la vez, concéntrate en uno solo, así evitas enrollarte.
3) Conectarás mejor si tu historia es positiva (y no trágica). Las personas recuerdan mucho más los mensajes positivos que los negativos.
4) Fácil de entender. Lo más importante es que nos entiendan, usa el lenguaje adecuado a tu público.
Pregunta: ¿Por qué crees que una historia vale más que mil palabras? ¿Lo has puesto en práctica?
Excelente consejo.
Quizás con una historia vemos de forma más «práctica» el concepto que queremos transmitir. Jesús lo hacía pero nosotros seguimos haciéndolo con los niños en las escuelas dominicales. Contamos la historia de… o la de…
¡Gracias por compartirlo!
Sí, con los niños es casi obligatorio usar historias para conseguir su atención.. =)
Exacto, quizás sea una razón más por la que una historia vale más: porque captan nuestra atención.
Respuesta a la pregunta: creo que hay historias que son testimoniales… y que muestran lo que Dios hace en nuestras vidas, o reflejan indirectamente algún pasaje de la Escritura. Creo que por eso son luz, porque se puede aprender de ellas, sólo hay que saber escuchar…